sábado, 25 de abril de 2009

"Radiografía de un Mercenario".


¡Compañera, ese viejo se “urgió” demasiado con eso que usted, dijo, sabe? Ja ja ja, le vío la cara?

Yo, comencé “trabajando” en política a los 18 años. Comencé con ella, la Más Grande, con “la tía”.
Pero a mí, me pagaban si. Recorrí Chile de norte a sur, con esta “w...”
No, si estos tipos tienen plata, y lo único que uno tiene que hacer, es sacarles! No se les hace ni una “w..” gratis! A mí, no me engañan.
Compañera, en política andan muchos mercenarios, entre los cuales me incluyo. Y uno va, al mejor postor no más poh. Si total, todos estos “weones”, mienten! Yo, no le creo a nadie. Esta "w..” es un trabajo sucio y punto.

¿Sabe usted, lo que significa la palabra “política”, en verdad?
*Significa: El arte de mentir.

Y uno, ya pasando los 30, ya no, ya nadie viene a “engrupirlo”. Alguna vez creí, claro. Pero ya no, me di cuenta que son todos la misma “w..” Y el único partido que siempre estuvo al lado de los trabajadores, y jamás renegó del “cadáver inmortal” (como dijera Neruda) Mandó a la mierd, sus principios, cuando murió la que los sostenía y obligaba a los demás a sostenerlos junto con ella; ella, “la más Grande”, “la tía”.

De ahí, para acá, ya no hay nadie.

Me sorprendió la mirada fija y casi “transparente” de sus ojos, y como buscaba los míos. Recordé las enseñanzas de un viejo profesor de Universidad; hay dos tipos de persona que miran fijo a los ojos:

1. Los que te dicen la verdad, y son demasiado honestos, siempre.

2. Y los que dominan el arte de mentir, los mentirosos, manipuladores e inescrupulosos compulsivos.

Respondí: Pero bueno, algo te debió haber quedado haber estado “trabajando” con esa mujer tan Grande, para algo te habrá servido? Sí, si, me quedaron valores, principios, claro que sí. Pero después, todos se los han pasado por la “r…”
Ok, ya no crees en nadie, pero dime: ¿Crees en ti? ¿Crees en la gente? ¿En tu Pueblo?
Sí, claro que creo. Si en los que no creo es en estos “w…..” de las cúpulas. Todos son la misma mierda, de derecha, de centro, el oficialismo, todos la misma mierda! Y ahora, quieren adueñarse de esto, también. Por eso yo les saco plata. Ya que del “otro” lado estoy fichado, y no me dan trabajo en ninguna parte... ¿Y de algo hay que comer, no compañera?

Bien, puedes pensar lo que quieras; porque tienes tus motivos y tu experiencia de vida, que te llevan a sentir lo que sientes. Pero recuerda esto: Al Pueblo, a nuestro Pueblo, no se les caga jamás, me oíste!?
Si algún día tienes la oportunidad de luchar de verdad, de sumarte ha algo Realmente Verdadero, nunca lo dudes, y esa será la forma de darle sentido al sin sentido… De morir feliz! De no sentir lo que estas sintiendo; que el viaje, no valió la pena.

Por que yo creo, quiero creer que mi especie es la más estúpida del planeta. Pero cuando se está en el fondo del precipicio, siempre se luchará por salir hacia arriba, de unirse, de romper cadenas. Ya estamos llegando al fondo, queda la peor parte aún… pero se podrá. Yo apuesto por el futuro, por la Fe en mí y en todos, yo defiendo mi derecho a soñar y ha Crear mi propio destino. Y no me vendo, no me arriendo, solo resisto más o menos íntegra, pero resisto. Al igual que todos, que muchos… Esperando el fin del camino, para empezar uno nuevo.

*Esta es la triste radiografía de un “mercenario” que todos los días se levanta jugando a “cara o cruz”?

domingo, 19 de abril de 2009

"La canción desesperada"


Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
El río anuda al mar su lamento obstinado.

Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado!

Sobre mi corazón llueven frías corolas.
Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos!

En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.

Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio!

Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.

Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio!

En la infancia de niebla mi alma alada y herida.
Descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!

Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo.
Te tumbó la tristeza, todo en ti fue naufragio!

Hice retroceder la muralla de sombra,
anduve más allá del deseo y del acto.

Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto.

Como un vaso albergaste la infinita ternura,
y el infinito olvido te trizó como a un vaso.

Era la negra, negra soledad de las islas,
y allí, mujer de amor, me acogieron tus brazos.

Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta.
Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro.

Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!

Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido.

Cementerio de besos, aún hay fuego en tus tumbas,
aún los racimos arden picoteados de pájaros.

Oh la boca mordida, oh los besados miembros,
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.

Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo
en que nos anudamos y nos desesperamos.

Y la ternura, leve como el agua y la harina.
Y la palabra apenas comenzada en los labios.

Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en él cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio!

Oh, sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron!

De tumbo en tumbo aún llameaste y cantaste.
De pie como un marino en la proa de un barco.

Aún floreciste en cantos, aún rompiste en corrientes.
Oh sentina de escombros, pozo abierto y amargo.

Pálido buzo ciego, desventurado hondero,
descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!

Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.

El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros.

Abandonado como los muelles en el alba.
Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.

Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.
Es la hora de partir. Oh abandonado!

viernes, 17 de abril de 2009

Marchas...


Zapatillas rojas, jeans gastados, chamarra negra.
Morral, limones, pañuelo al cuello;
y a marchar!

Con un fantasma herido que dice; que Unido, jamás será vencido!!

Fantasma de algún pasado... alguien, te vio pasar.
Fantasma del continente...

Las venas palpitan fuertes al ver llegar a los obreros, mezclillas gastadas, cascos de mina y construcción.

Chile en pleno en la marcha!

No falta nadie, estamos todos.
Somos la ausencia que vuelve a caminar sus recuerdos...
Somos la ausencia que vuelve a retomar el camino.

"Aquí están, no se han ido los que siempre han sufrido"

No hay palos, no hay guanacos, no hay bombas que separen
la pasión del sentimiento, del hermano, del compañero-amigo,
del Pueblo combativo.

sábado, 11 de abril de 2009

"Hombre que mira la luna".

Es decir la miraba porque ella
se ocultó tras el biombo de nubes
y todo porque muchos amantes de este mundo
le dieron sutilmente el olivo

con su brillo reticente la luna
durante siglos consiguió transformar
el vientre amor en garufa cursilínea
la injusticia terrestre en dolor lapizlázuli

cuando los amantes ricos la miraban
desde sus tedios y sus pabellones
satelizaba de lo lindo y oía
que la luna era un fenómeno cultural

pero si los amantes pobres la contemplaban
desde su ansiedad o desde sus hambrunas
entonces la menguante entornaba los ojos
porque tanta miseria no era para ella

hasta que una noche casualmente de luna
con murciélagos suaves con fantasmas y todo
esos amantes pobres se miraron a dúo
dijeron no va más al carajo selene

se fueron a su cama de sábanas gastadas
con acre olor a sexo deslunado
su camanido de crujiente vaivén

y libres para siempre de la luna lunática
fornicaron al fin como dios manda
o mejor dicho como dios sugiere.